Está bien que nos perfumemos, pero ¿dónde nos perfumamos? ¿Qué ropa perfumamos? ¿Dónde tenemos que vaporizar nuestra fragancia preferida para que deje un olor duradero y agradable?
¿Dónde aplicar el perfume?
En la piel
Coco Chanel decía que nos tenemos que perfumar donde queremos que nos besen. El perfume se pone, en primer lugar, en la piel. De hecho, el perfume reacciona con el contacto de la piel y desprende una fragancia única a quien lo lleva.
Con el calor, los perfumes exhalan sus olores. Por tanto, tienes que aplicarte el producto en los puntos en los que el cuerpo desprende calor. Es decir, en las zonas un tanto húmedas y cálidas del cuerpo como cuello, nuca, parte trasera de las rodillas, escote, tobillos, zona de los riñones, ombligo, detrás del lóbulo de la oreja, la parte interior del puño… El aroma se desprenderá con cada palpitación del corazón. También lo puedes aplicar en zonas móviles como las articulaciones: dejarás una estela con cada movimiento.
En el cabello
Aplica el perfume en las raíces, si tienes el cabello corto y, en las puntas, si lo tienes largo.
En la ropa
Claro que puedes perfumar tu ropa, pero no de cualquier manera. En primer lugar, tienes que saber que no todos los tejidos revelan los olores de la misma manera. Los tejidos naturales como la lana, la seda, la cachemira, el terciopelo, el algodón o el lino exhalan perfectamente los olores, pero no ocurre lo mismo con los tejidos sintéticos. Cuidado con las manchas imborrables en la seda.
Para perfumar la ropa correctamente, vaporiza el perfume a una distancia de 10 cm. El dobladillo de la falda, el foulard, y el forro de chaquetas y abrigos son las zonas que mejor retienen el olor.
No perfumes un tejido con varios productos diferentes. Si mezclas varios perfumes corres el riesgo de obtener un resultado final un tanto desagradable. Si cambias de perfume con frecuencia, evita perfumar la ropa. La fragancia de tu piel será suficiente.
Y también
-Vaporiza el perfume delante de ti y sumérgete en la nube que se ha creado, que impregnará todo tu cuerpo.
-No dudes en perfumar sábanas, almohada y armario.
-También puedes añadir unas gotas de tu fragancia preferida en el agua en el que aclararás tu ropa interior.
-Vaporiza un pañuelo y mételo en el bolsillo o en el bolso.
¿Cuándo perfumarse?
La cacofonía olfativa del transporte público puede crear nauseas y migrañas por el fuerte olor. Por tanto, evita inundarte de perfume antes de coger el metro o de subirte al coche. Perfúmate una vez llegues al destino y no dudes en repetir la operación a lo largo del día. Es mejor que saturar el olfato de los que te rodean desde por la mañana.