Índice
Acepte como natural la rivalidad y los celos entre hermanos.
• Escuche a su niño cuando se sienta celoso y permita que se exprese. Recuerde que los celos tienen que ver con emociones, no con objetos.
• Ignore los chismes entre sus hijos, ocúpese de la situación y no del niño que causó el problema.
• No se preocupe de quién empezó el pleito, ayude a los dos hermanos a solucionar el conflicto.
• No permita que un conflicto entre los miembros de la familia se quede sin resolver.
• No ofrezca soluciones ni consejos a sus hijos cuando intentan arreglar sus diferencias, sólo escúchelos y trate de entender a ambos.
• Sea lo más imparcial posible, no apoye ningún punto de vista ni tome partido por nadie.
• Encuentre un equilibrio para tratar a todos los hijos con justicia y equidad, aunque no pueda darles exactamente lo mismo.
• Dedique atención personal y un tiempo exclusivo a cada niño.
• Escuchar para identificar el problema.
• Analizarlo, generar varias soluciones, elegir la mejor para todos, establecer compromisos.
• Después, revisar los resultados y dar las gracias a los que ayudaron a resolverlo.
• No importa quién empezó el pleito, los dos hermanos tienen un problema y es necesario solucionarlo para que ambos vuelvan a estar en paz. Cada uno tiene responsabilidad en el conflicto y también responsabilidad en la solución.
• No compare a sus hijos ni ponga a uno de ellos como ejemplo frente a los demás.
• Permita que los niños decidan si quieren o no estar con sus hermanos.
• Sea lo más imparcial posible.
Le dejo este linck http://www.bilbao.net/castella/educacion/apoyo_educacion/educar_paz.pdf
• Escuche a su niño cuando se sienta celoso y permita que se exprese. Recuerde que los celos tienen que ver con emociones, no con objetos.
• Ignore los chismes entre sus hijos, ocúpese de la situación y no del niño que causó el problema.
• No se preocupe de quién empezó el pleito, ayude a los dos hermanos a solucionar el conflicto.
• No permita que un conflicto entre los miembros de la familia se quede sin resolver.
• No ofrezca soluciones ni consejos a sus hijos cuando intentan arreglar sus diferencias, sólo escúchelos y trate de entender a ambos.
• Sea lo más imparcial posible, no apoye ningún punto de vista ni tome partido por nadie.
• Encuentre un equilibrio para tratar a todos los hijos con justicia y equidad, aunque no pueda darles exactamente lo mismo.
• Dedique atención personal y un tiempo exclusivo a cada niño.
• Escuchar para identificar el problema.
• Analizarlo, generar varias soluciones, elegir la mejor para todos, establecer compromisos.
• Después, revisar los resultados y dar las gracias a los que ayudaron a resolverlo.
• No importa quién empezó el pleito, los dos hermanos tienen un problema y es necesario solucionarlo para que ambos vuelvan a estar en paz. Cada uno tiene responsabilidad en el conflicto y también responsabilidad en la solución.
• No compare a sus hijos ni ponga a uno de ellos como ejemplo frente a los demás.
• Permita que los niños decidan si quieren o no estar con sus hermanos.
• Sea lo más imparcial posible.
Le dejo este linck http://www.bilbao.net/castella/educacion/apoyo_educacion/educar_paz.pdf
Excelente !!
Yo también, como Mary tengo dos hijos, un varón y una damita de 15 y 13 años respectivamente , e igual los pleitos estan a la orden del dia, es dificil ser imparcial a veces, pero con los consejos de Mel
