Al dormir se reponen nuestras energías perdidas durante el día; a pesar de que hay días en los que no nos sentimos agotados lo más recomendable es siempre dormir bien, es decir al despertar debemos de tener una sensación de bienestar y de que hemos recuperado las fuerzas perdidas.
Cuando un niño o un adulto no descansan lo suficiente, dan muchas vueltas en la cama y al levantarse tienen la sensación de no haber descansado bien; lo más probable es que algo dentro de ellos no esté funcionando bien, si se pasa por alto este aviso las consecuencias pueden ser graves, de tal forma que un simple problema puede convertirse en algo serio.
Otra situación complicada que ocurre con frecuencia es que cuando no dormimos bien un día y al siguiente tampoco, nos tomamos un somnífero de la farmacia. De momento este nos permitirá dormir, pero es una forma de engañarnos a nosotros mismos con el efecto que nos provoca esta droga autorizada, ya que el problema seguirá presente y puede que la enfermedad que tengamos se agrave con el tiempo.
Los seres humanos requerimos dormir ocho horas, más o menos, para reponer nuestras fuerzas. Cuando no se duerme por la vía normal, significa que algo anormal está ocurriendo dentro de nuestro organismo. Con las drogas para dormir no solucionamos el problema, al contrario lo agravamos.
Las razones más comunes por las cuales no se duerme bien son el tener serios problemas psicológicos. La parte psicológica es de suma importancia, ya que puede afectar al resto del organismo. Factores como un mal trabajo o una mala convivencia matrimonial, por ejemplo, pueden hacer que perdamos la salud, ya que ocasionan una pérdida de nuestra felicidad.
Los problemas y los disgustos suelen provocar enfermedades. Todas las personas se enfrentan constantemente a problemas y a disgustos a lo largo de la vida, lo mejor que se puede hacer ante ellos, es dejarlos pasar, no debemos de permitir que nos afecten, ya que es muy probable que terminen provocándonos alguna enfermedad.
Hay millones de razones por las cuales se pierde el sueño: problemas con los hijos, problemas en el trabajo, alguna enfermedad, por tener muchos pendientes, por mal de amores, en fin, la lista es infinita. Aun teniendo un serio problema debemos de ser conscientes de que haremos lo que esté en nuestras manos para solucionarlo y perder la salud no es una de las opciones.
Referencia informativa: Hidalgo, Inocencia, Dra. El colesterol en los niños y en los mayores. Edicions Cedel, Barcelona, España, 2006; Samper, Rosa María. Conocer el colesterol. Fapa Ediciones, España, 2007; Möller, Edwin. Buena nutrición, cero infartos. Grijalbo, México, 2008
Fuente: Departamento de Comunicación y Contenido, TodoEnSalud.org