Los seres humanos necesitamos que nos digan lo que está bien y lo que está mal. Soy de los que piensan que no hay en esencia nada bueno ni nada malo. Lo que nos da el valor es solo la cantidad.
Si tenemos un vaso de vino es beneficioso para la salud, si tomamos muchos vasos es perjudicial.
Lo mismo lo podemos llevar a la comida, poca comida puede llevarnos a la desnutrición, mucha comida a la obesidad.
El ejercicio moderado es sano, el deporte de competición perjudica más de lo que beneficia.
El exceso de trabajo nos vuelve indiferentes a otras cuestiones de la vida. La falta de trabajo nos muestra como fuera del entorno social y nos vuelve antisistema.
Fumar dos cigarrillos diarios activa la respiración, fumar 40 cigarrillos nos atasca las arterias.
Si hacemos demasiada vida social nos olvidamos de nosotros mismos, sino hacemos vida social nos volvemos desconfiados.
Si hablamos mucho somos unos parlanchines, si hablamos poco nos volvemos ahorrativos y huraños.
Creo que todo lo que realizamos tiene un punto de positividad que es su justa medida.
Tan malo es pecar por exceso como por defecto.
Si tenemos un vaso de vino es beneficioso para la salud, si tomamos muchos vasos es perjudicial.
Lo mismo lo podemos llevar a la comida, poca comida puede llevarnos a la desnutrición, mucha comida a la obesidad.
El ejercicio moderado es sano, el deporte de competición perjudica más de lo que beneficia.
El exceso de trabajo nos vuelve indiferentes a otras cuestiones de la vida. La falta de trabajo nos muestra como fuera del entorno social y nos vuelve antisistema.
Fumar dos cigarrillos diarios activa la respiración, fumar 40 cigarrillos nos atasca las arterias.
Si hacemos demasiada vida social nos olvidamos de nosotros mismos, sino hacemos vida social nos volvemos desconfiados.
Si hablamos mucho somos unos parlanchines, si hablamos poco nos volvemos ahorrativos y huraños.
Creo que todo lo que realizamos tiene un punto de positividad que es su justa medida.
Tan malo es pecar por exceso como por defecto.