Chicas.. no se Ustedes pero al menso en mi caso mi debilidad es el PAN.
Aqui les paso unas buenas razones por las cueles no debemos de quitar el PAN, de nuestras dietas...
Son muchas las dietas que reducen al mínimo el pan y todos los hidratos de carbono, o de plano lo eliminan de ellas, por el temor que existe hacia este alimento.
El pan no debería salir de nuestra dieta para bajar de peso ya que no engorda si lo consumimos moderadamente y ahora te explico el por qué.
Bajo contenido graso
Dentro de los componentes que podemos encontrar en el pan, debemos decir que su contenido en grasa es muy bajo o incluso nulo en algunas de sus variedades. Si consideramos que es de la grasa de la que escapamos cuando hacemos dietas, el pan no significaría un riesgo para nuestra dieta. Además te contamos que el pan no tiene una suma elevada de calorías ya que una rebanada regular sólo tiene 70 Kcal, o sea, lo mismo que una fruta como la naranja o la manzana, lo que incluso lo hace un alimento ideal para el pequeño snack del medio día.
Controla el hambre súbita
El pan tiene cantidades considerables e importantes de carbohidratos complejos que van liberando su energía de manera paulatina durante el día lo que nos permite evitar los estímulos de hambre que surgen si comemos alimentos muy livianos. Además nos permite estar con energía durante el día y evitar las descompensaciones que muchas dietas rigurosas provocan.
Ayuda digestiva
Si bien el pan blanco con el negro no tienen muchas diferencias en cuanto a su contenido calórico, el pan integral además nos ayudaría a bajar de peso por que al tener grandes cantidades de fibra nos ayuda a sentirnos satisfechos más tiempo y nos ayuda también en la digestión y buen funcionamiento de nuestro organismo, controlando nuestro metabolismo de base.
Elaboración básica
El pan, al estar elaborado con harina, lo convierte en uno de los alimentos a base de granos de cereal más saludables ya que es una buena fuente de vitaminas, minerales y fibra, que de consumirlos nos puede ayudar a evitar algunas enfermedades crónicas. Además, la fortificación de los alimentos hechos a base de cereales con ácido fólico y otras vitaminas, puede ayudar a disminuir la incidencia de enfermedades cardíacas y algunos tipos de cáncer.
Ojo con lo que le ponemos
El pan no es lo que nos engorda sino lo que ponemos en él. Ya sea mantequilla, jamón, queso o embutidos, es lo que le proporciona las calorías extras al pan y que puede pasar de sólo aportar 70 calorías a unas 230 por ración. Si bien, en el mercado existen muchos tipos de panes, los más recomendados son los que no están hechos con materia grasa como la baguette o los diversos panes de moldes integrales.
Entrega energía
Los hidratos de carbono complejos son lejos una de las mejores fuentes de energía ya que nos entregan la glucosa, que es la principal fuente de energía de nuestro cerebro. Y además sólo nos aportan 4kcal por gramo ante los 9kcal que nos entrega la grasa. En definitiva, es parte de un mito que los carbohidratos sólo nos engordan.
Fibra
Unos más que otros, el pan nos aporta un excelente contenido en fibra lo que no sólo nos ayuda a controlar nuestro peso y mantenernos más rato sin hambre sino que además es esencial para tener una vida sana.
Vitaminas y Minerales
Existen muchas vitaminas como la B1, B2 y B3, que están presentes en el pan, lo que nos ayuda a mantener sanos la piel, el sistemaza digestivo y nervioso. Además su contenido en ácido fólico es esencial para el desarrollo entre otras, que te ayudan a obtener la energía de los hidratos de carbono y contribuyen a mantener sanos la piel, el sistema nervioso y el aparato digestivo.
Aumenta el metabolismo
Como se decía, gran parte de lo que nos aporta el pan son hidratos de carbono, que se metabolizan en la medida que tengamos movimiento. En este sentido, comer pan es saludable si además hacemos ejercicio en proporción a lo que comemos, es decir, si comemos uno al día y somos sedentarias está bien, pero si comemos más de cuatro porciones y pasamos todo el día sentadas es evidente que hasta con lechuga nos va a engordar.
Mejor que un dulce
Tiene menos grasa, produce una sensación de saciedad y placer, aumenta el metabolismo y además existe en miles de versiones más o menos light, por lo que es un excelente reemplazo de golosinas con calorías vacías que no aportan nada más que kilos y las ganas de seguir comiéndolas.
Como vemos lo que engorda no es el pan sino lo que le ponemos de relleno y las cantidades exageradas que ingerimos.
Aqui les paso unas buenas razones por las cueles no debemos de quitar el PAN, de nuestras dietas...
Son muchas las dietas que reducen al mínimo el pan y todos los hidratos de carbono, o de plano lo eliminan de ellas, por el temor que existe hacia este alimento.
El pan no debería salir de nuestra dieta para bajar de peso ya que no engorda si lo consumimos moderadamente y ahora te explico el por qué.
Bajo contenido graso
Dentro de los componentes que podemos encontrar en el pan, debemos decir que su contenido en grasa es muy bajo o incluso nulo en algunas de sus variedades. Si consideramos que es de la grasa de la que escapamos cuando hacemos dietas, el pan no significaría un riesgo para nuestra dieta. Además te contamos que el pan no tiene una suma elevada de calorías ya que una rebanada regular sólo tiene 70 Kcal, o sea, lo mismo que una fruta como la naranja o la manzana, lo que incluso lo hace un alimento ideal para el pequeño snack del medio día.
Controla el hambre súbita
El pan tiene cantidades considerables e importantes de carbohidratos complejos que van liberando su energía de manera paulatina durante el día lo que nos permite evitar los estímulos de hambre que surgen si comemos alimentos muy livianos. Además nos permite estar con energía durante el día y evitar las descompensaciones que muchas dietas rigurosas provocan.
Ayuda digestiva
Si bien el pan blanco con el negro no tienen muchas diferencias en cuanto a su contenido calórico, el pan integral además nos ayudaría a bajar de peso por que al tener grandes cantidades de fibra nos ayuda a sentirnos satisfechos más tiempo y nos ayuda también en la digestión y buen funcionamiento de nuestro organismo, controlando nuestro metabolismo de base.
Elaboración básica
El pan, al estar elaborado con harina, lo convierte en uno de los alimentos a base de granos de cereal más saludables ya que es una buena fuente de vitaminas, minerales y fibra, que de consumirlos nos puede ayudar a evitar algunas enfermedades crónicas. Además, la fortificación de los alimentos hechos a base de cereales con ácido fólico y otras vitaminas, puede ayudar a disminuir la incidencia de enfermedades cardíacas y algunos tipos de cáncer.
Ojo con lo que le ponemos
El pan no es lo que nos engorda sino lo que ponemos en él. Ya sea mantequilla, jamón, queso o embutidos, es lo que le proporciona las calorías extras al pan y que puede pasar de sólo aportar 70 calorías a unas 230 por ración. Si bien, en el mercado existen muchos tipos de panes, los más recomendados son los que no están hechos con materia grasa como la baguette o los diversos panes de moldes integrales.
Entrega energía
Los hidratos de carbono complejos son lejos una de las mejores fuentes de energía ya que nos entregan la glucosa, que es la principal fuente de energía de nuestro cerebro. Y además sólo nos aportan 4kcal por gramo ante los 9kcal que nos entrega la grasa. En definitiva, es parte de un mito que los carbohidratos sólo nos engordan.
Fibra
Unos más que otros, el pan nos aporta un excelente contenido en fibra lo que no sólo nos ayuda a controlar nuestro peso y mantenernos más rato sin hambre sino que además es esencial para tener una vida sana.
Vitaminas y Minerales
Existen muchas vitaminas como la B1, B2 y B3, que están presentes en el pan, lo que nos ayuda a mantener sanos la piel, el sistemaza digestivo y nervioso. Además su contenido en ácido fólico es esencial para el desarrollo entre otras, que te ayudan a obtener la energía de los hidratos de carbono y contribuyen a mantener sanos la piel, el sistema nervioso y el aparato digestivo.
Aumenta el metabolismo
Como se decía, gran parte de lo que nos aporta el pan son hidratos de carbono, que se metabolizan en la medida que tengamos movimiento. En este sentido, comer pan es saludable si además hacemos ejercicio en proporción a lo que comemos, es decir, si comemos uno al día y somos sedentarias está bien, pero si comemos más de cuatro porciones y pasamos todo el día sentadas es evidente que hasta con lechuga nos va a engordar.
Mejor que un dulce
Tiene menos grasa, produce una sensación de saciedad y placer, aumenta el metabolismo y además existe en miles de versiones más o menos light, por lo que es un excelente reemplazo de golosinas con calorías vacías que no aportan nada más que kilos y las ganas de seguir comiéndolas.
Como vemos lo que engorda no es el pan sino lo que le ponemos de relleno y las cantidades exageradas que ingerimos.