Cuando los sentimientos amorosos no son mutuos, ambas partes se sienten doloridas. Siempre se piensa que el que más sufre es el no correspondido pero, la situación, es también dolorosa para quien es el blanco del afecto no deseado. Ambos sufren aunque cada uno por una razón bien distinta. Uno de los problemas más importantes en una relación surge cuando el amor no es recíproco. Socialmente, las culpas recaen sobre la persona que no responde a los sentimientos. Una investigación realizada por Baumeister y Sara Wotman en 1992 demostró que, el sufrimiento es compartido. La chispa del desamor En los cuentos de hadas, los personajes encuentran el amor verdadero y viven felices para siempre. No es así en la vida real, donde la relación de pareja alimenta conflictos, y donde la cuestión principal es cómo se manejan estas situaciones. Una amplia gama de aspectos pueden hacer que una persona deje de querer a otra, y haga saltar la chispa del desamor: el deseo de autonomía, la falta de apoyo o sentimiento de aislamiento en la pareja, la falta de apertura e intimidad, la ausencia de romanticismo o pasión... Formas de afrontar el problema En muchos casos, la persona que deja de ser amada no es consciente de la existencia de estos problemas hasta que llega la ruptura. Incluso en ese momento, niega su existencia y busca causas externas a la propia pareja. En otras, la pareja, consciente de la situación, se enfrenta a ella. Conversaciones sobre los sentimientos y el estado de la pareja, ayudan a dar continuidad al amor recíproco. Los sentimientos en un amor no correspondido Cuando el amor desaparece, el amante rechazado siente destrozado su corazón y perdida su autoestima. A su vez, debido a que a menudo mantiene los sentimientos amorosos y esperanzados, puede tener recuerdos positivos del episodio. Frustración y esperanza hacen el camino más fácil al amor no correspondido Para quien rechaza, el cuadro es completamente negativo. Inicialmente, su autoestima aumenta por la adoración; pero rápidamente este estado es reemplazado por sentimientos de culpabilidad, irritación e incluso ira. ¿Qué estrategia emplear? Tratar de ser amable con el pretendiente sólo puede despertar falsas esperanzas. ¿Cómo se puede evitar los sentimientos de culpa? Ante situaciones de amor no recíproco, Baumeister y Wotman proponen la estrategia del "zombi". Cuando el encuentro con la persona enamorada es inevitable, se aconseja un comportamiento amable pero breve. Es preferible evitar cualquier tipo de contacto para, así, evitar la creación de falsas esperanzas en la persona enamorada. Es mejor no mostrar ninguna emoción, ni negativa ni positiva, que pueda gratificar al perseguidor. Aunque resulte duro en un principio, es el método más eficaz de desenamorar a una persona o, al menos, evitar que piense que es recíproco. |