Queridas amigas: Aunque nunca antes he publicado algo parecido, hoy siento la necesidad de buscar consejos y apoyo en este foro. Di por el foro buscando alguna lectura sobre la depresión y temas similares y aunque encontré mucho material, no dejé de sentirme necesitada de interactuar con otras personas. Por esa razón estoy aquí. También espero que si alguien atraviesa una situación similar o difícil, logre encontrar alguna respuesta que quizá a veces por timidez o vergüenza, no la quieren publicar y sin embargo podría encontrar en mi publicación. Tuve una relación sentimental que duró un poco más de cinco años con una persona de otro país. Aparte de la diferencia geográfica, también había una diferencia en edad, yo le llevaba a él 10 años. La relación inició teniendo él 19 años y yo 29, hasta ahora. Aparte de esto, la diferencia en cuanto a crianza y cuestiones socioculturales marcaban una gran brecha, pues mientras yo comencé a tomar responsabilidades como un trabajo, desde los 18 años, él ha sido prácticamente mantenido por sus padres y hasta el día de hoy nunca ha trabajado y por lo que me decía no piensa hacerlo. Viajé muchas veces para poder verlo, inclusive en una ocasión pude quedarme durante unos meses en su país pero la labor de conseguir documentos legales para permanecer es muy complicado y además requiere de mucha ayuda y apoyo de gente que vive en el país donde uno quiere quedarse. Esta situación no se dio, pues, aunque logró conseguir permiso de sus padres para que yo pudiera quedarme viviendo en su casa, su apoyo y ayuda en cuanto a los trámites y otras cosas, prácticamente no se daba. Aparte de esto, está el tema sobre su carácter, era una persona que de haber sido bastante cálida al principio (como todos), después se fue volviendo bastante distante y muy tosco en el trato para conmigo. Sin embargo la relación entre rupturas y problemas no se terminaba. Sé y estoy consciente que se volvió una relación dependiente, pues, él dependía mucho de mí como yo de él. Me enamoré profundamente de esta persona, sin embargo hace dos semanas después de una discusión terminamos y finalmente, después de tanto esfuerzo, tanto dinero invertido en boletos, viajes, regalos, me di cuenta de que, no tenía sentido seguir. Al final de ser él quien quería terminar, resulté siendo yo la que ya no quiso seguir la relación de esta manera. Siento mi autoestima destruida, y como le dije a él, siento que me convertí en una mujer detestable, en la imagen de una mujer que yo odiaba llegar a ser, poco a poco me fui convirtiendo en una. Mientras él parecía no fallar en la relación y encontrar siempre argumentos para hacer parecer que todo era mi causa, ahora mi sentimiento de inseguridad es enorme. Sé que cometí errores, porque como ser humano no podía evitar cometerlos y también sé que le causé muchos dolores y en algún momento llegué a herirlo. Pero todo el tiempo me martillaba en la cabeza el pensamiento de que aún con eso, habían muchas cosas, muchas humillaciones, insultos y palabras que yo no merecía y que no tenían ninguna justificación. Un familiar muy cercano a él estos últimos días me dice que él es un inmaduro, pero que también el problema era que yo estaba lejos. Siento que de ser eso al principio tal vez un obstáculo, al final se logró vencer y el obstáculo más grande fue su poca voluntad para hacer las cosas. Mientras yo viajaba una y otra vez, gastando hasta dinero que no tenía, él simplemente se dedicaba a quejarse del dolor que le causaban mis partidas y lo mucho que le costaba recuperarse. A veces siento que si yo no valía lo suficiente la pena para que él luchara. Hoy estoy atravesando ese duelo tan complicado de llevar, esa realidad tan difícil de ver que, más que se haya terminado la relación, es darme cuenta que para él no era algo tan importante ni tan valioso como para esforzarse un poco. Me habló varias veces de matrimonio, pero después me decía que una vez casados, yo tenía que aceptar que en algún momento él desearía irse al exterior y que tendría que aceptarlo. Yo no quise amarrarme en una relación en donde él parecía querer saciar sus sueños y sus deseos, a costa de los míos, por eso es que nunca acepté. Y cada vez más me causaba temor expresarle mi amor pues me respondía en ocasiones con enfado y a veces con fastidio. Sé que hice bien en abandonar y alejarme. Sé que hice lo mejor que pude, pero mi corazón parece no comprender que todo se terminó. Me abarca a veces la tristeza y a momentos pienso que no es justo que mientras yo me quedé aquí sintiendo que ha muerto una parte de mi propio ser, él se haya quedado viviendo en su zona de confort. Un sentimiento de culpa por momentos se me aparece y me da por preguntar si quizá yo no hice lo suficiente o si es que todavía queda algo más que pueda hacer. La última vez que hablamos, cuando terminó la relación le dije muchas cosas que antes no le había podido expresar por ese temor y esa tensión que siempre giraba entre nosotros y la comunicación, pero le dije que me sentía utilizada, que me sentía humillada y que mientras yo hasta me partía un brazo por él, él parecía que simplemente permanecía relajado y a veces hasta indiferente a mis sentimientos. Me dijo que él solo deseaba dedicarse a estudiar y que no quería tener más cosas como la relación en la cabeza. Inclusive culpó a la relación de las muchas veces en que bajaba su rendimiento. Pero ahora veo que solo son excusas. Y aún así también me he sentido culpable por lo que le dije y pienso que si no fui demasiado dura. Pero solo quise expresarle lo que me hacía sentir y muchas otras que yo veía y él no. Estoy tratando de reconstruir mi vida y de asimilar las respuestas a mis constantes preguntas sobre por qué razón o razones yo no debería volver y no debo volver atrás. Esto es lo que sucede, sé no soy la única persona atravesando una situación similar. Pero también sé que soy una de las muchas personas que se sienten casi indefensas ante tanto dolor. Espero sus palabras y gracias.