Chicas, les escribo un pedazo (bastante amplio) sobre el libro de Jorge Bucay, me parecio interesante compartirlo con ustedes.
Ahi para las que les gusta leer mucho, porque esta algo medio largo este capitulo del libro.
Solo puse lo que mas me intereso
AMARSE CON LOS OJOS ABIERTOS.- El desarrollo personal a traves de la pareja.
CAPITULO 9.-
Este intento de seguir siendo los mismos, lejos de promover el encuentro lo evita.
Tiene que ver con aquello que te dije de la identidad.
A partir de las frustraciones inherentes a la educación solemos creer que no somos valiosos o queribles tal como somos, y entones nos vemos empujados a crear una identidad a la medida de aquellos por los que nos sentimos rechazados, nuestros padres.
La clave consiste en animarnos a sacarnos de encima nuestra supuesta identidad, instalarnos en el mundo sin tener la exigencia de responder a ella, descubriéndonos todo el tiempo y observando que nos sale.
Cada vez estoy más convencida de que la identidad es algo que nos inventamos y nos hace sufrir.
No hay nada mas saludable que un encuentro autentico, sin mascaras, sin engaños, actualizado y sin expectativas.
Pienso que nos da tanto miedo entregarnos, fundirnos en el otro, que solo podemos hacerlo parcialmente.
El intento de protección contra los dos grandes monstruos: el rechazo y el abandono.
Cuando deseamos y el otro ESTA, es muy hermoso. Pero cuando no es así, el dolor nos parece más insoportable que cualquier otro sufrimiento.
Por eso frenamos a veces la tentación de ser espontáneos, buscamos vidas seguras encerradas en nuestra vieja personalidad calientita y estructurada.
Y no es que este mal, tampoco podemos vivir en carne viva.
Lo que pasa es que vivir encerrados en una identidad se vuelve, tarde o temprano, aburrido y angustiante.
Hay personas que llevan a abrirme y otras que me hacen cerrar.
Creo que en parte “ocurre” y que en parte soy yo quien decide abrirse o no con determinada persona en tal o cual momento.
Y esta es la paradoja del vínculo amoroso:
Todo el tiempo somos otro, y el otro… y el otro también es otro.
La propuesta es aceptar esto y ver que día se da el encuentro y que día no, aceptar las idas y vueltas de la relación como algo que es así, sin esperar otra cosa. No exigirnos sentir siempre lo mismo. Admitir con gusto el movimiento de las emociones y, por supuesto, aceptar que el otro también tenga esta conducta. Permitirse vivir lo misterioso de las relaciones, como decía el poema que te leí ese día en el bar:
Si sabes como relacionarte con tu marido o tu esposa
No estas verdaderamente casado,
Simplemente estas aplicando psicología.
Siempre que una relación es real,
Se esta creando y recreando
De momento a momento.
Pienso que esta dinámica de lo real también opera sobre la personalidad.
Me refiero al “ser” en pareja y al “ser” de cada uno. La personalidad es un vehiculo para llegar al ser; disolviéndola, llegamos a la captación de nuestra esencia.
Damos por sentado que somos el yo que nuestra mente ha construido y no advertimos que ese yo es algo que se formo en el pasado, que tiene sus raíces allí y que su lealtad esta dirigida a cosas que ocurrieron entonces, hechos y recuerdos mas o menos distorsionados que estamos sosteniendo y tratando de mantener o de ocultar. En consecuencia, no podemos estar totalmente presentes, porque estamos atados a las cosas del pasado que nos determinaron a crear identidad.
El trabajo consiste en cambiar nuestra lealtad al yo construido, el yo habitual, para el sentido vasto del ser que podríamos llamar nuestra verdadera naturaleza, que esta por afuera de las barreras de nuestro yo construido y que no puede ser contenido dentro de esas barreras.
Tenemos que estar listos para abandonar nuestra personalidad, para dejar que pierda fuerza, para agradecerle que nos haya ayudadazo a sobrevivir hasta ahora pero aceptar que ya no sirve.
El hecho de dar y recibir amor se convierte en una tarea muy ardua si no estoy decidido a dejar mi vieja estructura. No es que podamos tomar la decisión de dejar nuestra vieja identidad y conectarnos inmediatamente con nuestro ser. Si fuera tan fácil todo el mundo lo haría, porque todos buscamos amor.
No se trata de librarnos de nuestro yo construido, ni de romperlo, ni siquiera es cuestión de criticarlo o condenarlo de ninguna manera de ninguna manera. Hacer esto seria un error. Porque es un paso en el camino, tuvo y sigue teniendo una función.
La diferencia entre la estructura y la esencia a veces no son tan rígidas, pero siempre son importantes.
La estructura esta basada en el pasado, la esencia es siempre presente.
La estructura esta relacionada con tratar de hacer, con el esfuerzo; por el contrario, la esencia es sin esfuerzo, es no hacer.
La estructura esta siempre mirando algo, queriendo algo, NECESITANDO algo, siempre hambrienta y deficiente. La esencia esta llena, no necesita nada.
La estructura esta mirando afuera, la esencia se asienta (enfoca) en si misma.
Welwood nos anima a salirnos de la idea de un yo estructurado. El propone directamente que nos conectemos con el vacío en vez de esforzarnos en llenarlo con falsa identidad.
La mente no puede agarrar el vacío, la mente crea las historias sobre el vacío, como si fuera un agujero negro. El yo construye una barrera y todo lo que esta afuera aparece como potencialmente peligroso.
El yo estructurado transforma esa conducta evitativa en una necesidad vital, consiguiendo que la vida acabe girando permanentemente alrededor del peligro que implica el vacío.
Creo que estaremos mucho mas vivos si nos animamos a darnos cuenta de que no estamos necesariamente obligados a saber todo el tiempo quienes somos, y que no tenemos porque asegurar exactamente y al detalle que se puede esperar de nosotros.
Darnos cuenta de que si podemos (y quizá debemos) lanzarnos a la experiencia de lo que deviene sin encadenarnos a un yo que nos limite a unas pocas respuestas conocidas.
Estas ideas podrían ayudar a estar en pareja, porque permitirían aflojar viejas ataduras y sobre todo porque liberarían también a nuestros compañeros de ruta de sus propios condicionamientos individuales.
Roberto pensó que debía resolver este tema de su identidad.
Estaba viviendo un engaño. Por que no podía relacionarse con Laura como quien automáticamente era?
Decidí tomar mi propio address para el libro y dejar el anterior porque me conectaba con otro tiempo, con otra situación y con una realidad que ya no es la actual.
Que piensas tu sobre la capacidad de amar.
La gente suele quejarse de no ser querida cuando el verdadero problema es que no sabe querer.
Creo que esto es lo que hay que desarrollar.
Ortega y Gasset dice que para amar se necesitan varias condiciones.
La primera seria la percepción, la capacidad de ver al otro, de poder interesarnos por otra persona que no somos nosotros mismos.
Yo veo en algunas mujeres una actitud bien contradictoria. Se quejan de estar solas pero me sorprendo al ver el desprecio con el que hablan de los hombres.
Después se enojan al ser abandonadas, cuando en realidad ellas los abandonaron primero con su falta de amor.
Como tu me “enseñaste”, la manera de estar con otro de poder quererlo, de querer descubrirlo, es siendo capaz de aceptarlo como es.
Pero la mayoría de la gente no se preocupa por el tema de si quiere o no, solo se preocupa sobre si es querido y si se le demuestra el amor.
El otro día una amiga, en dialogo con su novio le dijo a el: “Si piensas así es que tu no me quieres”.
Y yo, poniéndome en el lugar de su pareja, le conteste: “Tu no lo quieres cuando piensa así”.
Ella se dio cuenta de que era cierto, que en realidad era ella la que no quería, pero de todas maneras se enojo conmigo y me pregunto que tenía yo en contra de la relación entre ellos.
Volvemos siempre a lo mismo, la dificultad para ver la cosa des uno y no desde el otro.
Como ayudaremos a las personas a desarrollar su capacidad para amar?
Seria bueno mostrarles su particular manera de no querer.
En el caso de mi amiga seria:
Tu no lo aceptas como es.
Tu te cierras cuando el te habla.
Date cuenta de que poco te importa lo que a el le interesa.
Tu lo criticas, lo menos precias, lo descalificas.
Tu, que sentías que amabas demasiado y te creías tan generosa, date cuenta de que solamente le das lo que tu quieres darle, que no te ocupas de saber lo que necesita, que solo das por tu necesidad de dar y no por lo bien que le pueda hacer a el lo que le estas dando.
Tu eres la que no sabes quien es, la que lo pusiste en un lugar y nunca mas… lo viste de verdad.
Como dice H. Prather hablando de la incapacidad de querer de las personas: “Creo que a la primera persona que no quieren es así mismos, y que se maltratan y menosprecian al igual que como lo hacen con los demás. Hay muchas personas que no pueden salir de si mismas, que no pueden interesarse en otro porque nadie les importa”.
Supongo que es por la misma razón que decidimos siempre que los problemas de pareja son problemas personales, porque alguien que puede amar, siempre va a encontrar algo para amar en la persona que tiene en frente.
Dice ortega y Gasset: “Nadie ama sin razón, el mito de que el amor es puro instinto es equivocado”.
Ahi para las que les gusta leer mucho, porque esta algo medio largo este capitulo del libro.
Solo puse lo que mas me intereso
AMARSE CON LOS OJOS ABIERTOS.- El desarrollo personal a traves de la pareja.
CAPITULO 9.-
Este intento de seguir siendo los mismos, lejos de promover el encuentro lo evita.
Tiene que ver con aquello que te dije de la identidad.
A partir de las frustraciones inherentes a la educación solemos creer que no somos valiosos o queribles tal como somos, y entones nos vemos empujados a crear una identidad a la medida de aquellos por los que nos sentimos rechazados, nuestros padres.
La clave consiste en animarnos a sacarnos de encima nuestra supuesta identidad, instalarnos en el mundo sin tener la exigencia de responder a ella, descubriéndonos todo el tiempo y observando que nos sale.
Cada vez estoy más convencida de que la identidad es algo que nos inventamos y nos hace sufrir.
No hay nada mas saludable que un encuentro autentico, sin mascaras, sin engaños, actualizado y sin expectativas.
Pienso que nos da tanto miedo entregarnos, fundirnos en el otro, que solo podemos hacerlo parcialmente.
El intento de protección contra los dos grandes monstruos: el rechazo y el abandono.
Cuando deseamos y el otro ESTA, es muy hermoso. Pero cuando no es así, el dolor nos parece más insoportable que cualquier otro sufrimiento.
Por eso frenamos a veces la tentación de ser espontáneos, buscamos vidas seguras encerradas en nuestra vieja personalidad calientita y estructurada.
Y no es que este mal, tampoco podemos vivir en carne viva.
Lo que pasa es que vivir encerrados en una identidad se vuelve, tarde o temprano, aburrido y angustiante.
Hay personas que llevan a abrirme y otras que me hacen cerrar.
Creo que en parte “ocurre” y que en parte soy yo quien decide abrirse o no con determinada persona en tal o cual momento.
Y esta es la paradoja del vínculo amoroso:
Todo el tiempo somos otro, y el otro… y el otro también es otro.
La propuesta es aceptar esto y ver que día se da el encuentro y que día no, aceptar las idas y vueltas de la relación como algo que es así, sin esperar otra cosa. No exigirnos sentir siempre lo mismo. Admitir con gusto el movimiento de las emociones y, por supuesto, aceptar que el otro también tenga esta conducta. Permitirse vivir lo misterioso de las relaciones, como decía el poema que te leí ese día en el bar:
Si sabes como relacionarte con tu marido o tu esposa
No estas verdaderamente casado,
Simplemente estas aplicando psicología.
Siempre que una relación es real,
Se esta creando y recreando
De momento a momento.
Pienso que esta dinámica de lo real también opera sobre la personalidad.
Me refiero al “ser” en pareja y al “ser” de cada uno. La personalidad es un vehiculo para llegar al ser; disolviéndola, llegamos a la captación de nuestra esencia.
Damos por sentado que somos el yo que nuestra mente ha construido y no advertimos que ese yo es algo que se formo en el pasado, que tiene sus raíces allí y que su lealtad esta dirigida a cosas que ocurrieron entonces, hechos y recuerdos mas o menos distorsionados que estamos sosteniendo y tratando de mantener o de ocultar. En consecuencia, no podemos estar totalmente presentes, porque estamos atados a las cosas del pasado que nos determinaron a crear identidad.
El trabajo consiste en cambiar nuestra lealtad al yo construido, el yo habitual, para el sentido vasto del ser que podríamos llamar nuestra verdadera naturaleza, que esta por afuera de las barreras de nuestro yo construido y que no puede ser contenido dentro de esas barreras.
Tenemos que estar listos para abandonar nuestra personalidad, para dejar que pierda fuerza, para agradecerle que nos haya ayudadazo a sobrevivir hasta ahora pero aceptar que ya no sirve.
El hecho de dar y recibir amor se convierte en una tarea muy ardua si no estoy decidido a dejar mi vieja estructura. No es que podamos tomar la decisión de dejar nuestra vieja identidad y conectarnos inmediatamente con nuestro ser. Si fuera tan fácil todo el mundo lo haría, porque todos buscamos amor.
No se trata de librarnos de nuestro yo construido, ni de romperlo, ni siquiera es cuestión de criticarlo o condenarlo de ninguna manera de ninguna manera. Hacer esto seria un error. Porque es un paso en el camino, tuvo y sigue teniendo una función.
La diferencia entre la estructura y la esencia a veces no son tan rígidas, pero siempre son importantes.
La estructura esta basada en el pasado, la esencia es siempre presente.
La estructura esta relacionada con tratar de hacer, con el esfuerzo; por el contrario, la esencia es sin esfuerzo, es no hacer.
La estructura esta siempre mirando algo, queriendo algo, NECESITANDO algo, siempre hambrienta y deficiente. La esencia esta llena, no necesita nada.
La estructura esta mirando afuera, la esencia se asienta (enfoca) en si misma.
Welwood nos anima a salirnos de la idea de un yo estructurado. El propone directamente que nos conectemos con el vacío en vez de esforzarnos en llenarlo con falsa identidad.
La mente no puede agarrar el vacío, la mente crea las historias sobre el vacío, como si fuera un agujero negro. El yo construye una barrera y todo lo que esta afuera aparece como potencialmente peligroso.
El yo estructurado transforma esa conducta evitativa en una necesidad vital, consiguiendo que la vida acabe girando permanentemente alrededor del peligro que implica el vacío.
Creo que estaremos mucho mas vivos si nos animamos a darnos cuenta de que no estamos necesariamente obligados a saber todo el tiempo quienes somos, y que no tenemos porque asegurar exactamente y al detalle que se puede esperar de nosotros.
Darnos cuenta de que si podemos (y quizá debemos) lanzarnos a la experiencia de lo que deviene sin encadenarnos a un yo que nos limite a unas pocas respuestas conocidas.
Estas ideas podrían ayudar a estar en pareja, porque permitirían aflojar viejas ataduras y sobre todo porque liberarían también a nuestros compañeros de ruta de sus propios condicionamientos individuales.
Roberto pensó que debía resolver este tema de su identidad.
Estaba viviendo un engaño. Por que no podía relacionarse con Laura como quien automáticamente era?
Decidí tomar mi propio address para el libro y dejar el anterior porque me conectaba con otro tiempo, con otra situación y con una realidad que ya no es la actual.
Que piensas tu sobre la capacidad de amar.
La gente suele quejarse de no ser querida cuando el verdadero problema es que no sabe querer.
Creo que esto es lo que hay que desarrollar.
Ortega y Gasset dice que para amar se necesitan varias condiciones.
La primera seria la percepción, la capacidad de ver al otro, de poder interesarnos por otra persona que no somos nosotros mismos.
Yo veo en algunas mujeres una actitud bien contradictoria. Se quejan de estar solas pero me sorprendo al ver el desprecio con el que hablan de los hombres.
Después se enojan al ser abandonadas, cuando en realidad ellas los abandonaron primero con su falta de amor.
Como tu me “enseñaste”, la manera de estar con otro de poder quererlo, de querer descubrirlo, es siendo capaz de aceptarlo como es.
Pero la mayoría de la gente no se preocupa por el tema de si quiere o no, solo se preocupa sobre si es querido y si se le demuestra el amor.
El otro día una amiga, en dialogo con su novio le dijo a el: “Si piensas así es que tu no me quieres”.
Y yo, poniéndome en el lugar de su pareja, le conteste: “Tu no lo quieres cuando piensa así”.
Ella se dio cuenta de que era cierto, que en realidad era ella la que no quería, pero de todas maneras se enojo conmigo y me pregunto que tenía yo en contra de la relación entre ellos.
Volvemos siempre a lo mismo, la dificultad para ver la cosa des uno y no desde el otro.
Como ayudaremos a las personas a desarrollar su capacidad para amar?
Seria bueno mostrarles su particular manera de no querer.
En el caso de mi amiga seria:
Tu no lo aceptas como es.
Tu te cierras cuando el te habla.
Date cuenta de que poco te importa lo que a el le interesa.
Tu lo criticas, lo menos precias, lo descalificas.
Tu, que sentías que amabas demasiado y te creías tan generosa, date cuenta de que solamente le das lo que tu quieres darle, que no te ocupas de saber lo que necesita, que solo das por tu necesidad de dar y no por lo bien que le pueda hacer a el lo que le estas dando.
Tu eres la que no sabes quien es, la que lo pusiste en un lugar y nunca mas… lo viste de verdad.
Como dice H. Prather hablando de la incapacidad de querer de las personas: “Creo que a la primera persona que no quieren es así mismos, y que se maltratan y menosprecian al igual que como lo hacen con los demás. Hay muchas personas que no pueden salir de si mismas, que no pueden interesarse en otro porque nadie les importa”.
Supongo que es por la misma razón que decidimos siempre que los problemas de pareja son problemas personales, porque alguien que puede amar, siempre va a encontrar algo para amar en la persona que tiene en frente.
Dice ortega y Gasset: “Nadie ama sin razón, el mito de que el amor es puro instinto es equivocado”.