Un día me propuse coleccionar instantes
Que decidí guardar en forma de recuerdos,
Fui escogiendo lo mejor de lo vivido
Sin importar el tema o el motivo.
Escogí un atardecer en el Pacifico
Y un amanecer en el Atlántico.
Un sábado en el centro de San Angel.
Un domingo por las calles de Cholula
Y una noche con neblina en las montañas.
Una mañana navegando por el río
Y otra cabalgando en la pradera.
Guarde también la tarde de mi boda
Y el instante del primer llanto de mis hijos.
Sus risas y sus gritos cundo juegan
Y su alegría en Navidad y el Día del Niño.
Guarde una noche de caricias con mi esposa
Y otra de parranda con mis cuates.
Guarde una platica tranquila con mis padres
Y una de recuerdos con mi abuela.
Un breve instante bromeando a mis hermanos
Y un atardecer regando los geranios.
Guarde una madrugada diciéndole te amo
Con la voz quebrada y el cuerpo tiritando.
Pero mi colección creció de tal manera
Que no alcanzaron los espacios de mi mente
Y deje mi colección de instantes,
Pendiente e inconclusa hasta la muerte.
Gabriel García Marquez
Que decidí guardar en forma de recuerdos,
Fui escogiendo lo mejor de lo vivido
Sin importar el tema o el motivo.
Escogí un atardecer en el Pacifico
Y un amanecer en el Atlántico.
Un sábado en el centro de San Angel.
Un domingo por las calles de Cholula
Y una noche con neblina en las montañas.
Una mañana navegando por el río
Y otra cabalgando en la pradera.
Guarde también la tarde de mi boda
Y el instante del primer llanto de mis hijos.
Sus risas y sus gritos cundo juegan
Y su alegría en Navidad y el Día del Niño.
Guarde una noche de caricias con mi esposa
Y otra de parranda con mis cuates.
Guarde una platica tranquila con mis padres
Y una de recuerdos con mi abuela.
Un breve instante bromeando a mis hermanos
Y un atardecer regando los geranios.
Guarde una madrugada diciéndole te amo
Con la voz quebrada y el cuerpo tiritando.
Pero mi colección creció de tal manera
Que no alcanzaron los espacios de mi mente
Y deje mi colección de instantes,
Pendiente e inconclusa hasta la muerte.
Gabriel García Marquez