Miles de mujeres se desesperan por encontrar ayuda, consejo o algo que les ayude a olvidar no sólo el amor de quien se fue, sino también la forma tan injusta en la que fueron tratadas, se les desvaloró, y no fueron correspondidas.
Pero muchas veces son esas mismas mujeres quienes continuamente traen de vuelta los sentimientos y recuerdos del pasado que tanto necesitan olvidar.
“¿Cómo pudo ser tan malo conmigo? ¿Cómo se le pudo olvidar todo lo que hice por él?”
El tiempo pasa, y contamos una a una las horas, los días, las semanas, y hasta los años sin él. Pese al tiempo, la angustia y el sufrimiento continúa.
¿Por qué las mujeres nos negamos a dejarlo marchar de nuestros recuerdos, corazón y sentimientos?
¿Por qué a pesar de hablar y dejarlo salir en palabras, se le sigue anidando en el corazón? Pareciese que el tiempo se detuviese, recordamos y repetimos nuestros tormentos del pasado, y lo que es peor: estamos pendientes de lo que “el ex” hace o deja de hacer, y eso no sólo nos llena de tristeza, sino también de cólera.
¿Por qué nos gusta hablar tanto de aquello que nos atormenta? Hablamos tanto de ello que pareciese una historia sin final, muchas mujeres tendemos a conversarlo a diario incluso varias veces al día… Y si bien “recordar es volver a vivir” ¿hasta cuando seremos incapaces de cerrar ciclos en nuestra vida?
AMIGAS.... LA VIDA ES SOLO UNA.... NO DESPERDICIES TU VALIOSO TIEMPO, RECORDANDO Y AÑORANDO A QUIEN NO LO MERECE.
Deja tus penas dolores y sufrimientos en las manos de Dios, emprende el
camino de experiencias y madurez que has adquirido del dolor que te ha
hecho crecer, trasciende y realízate como mujer.
Pero muchas veces son esas mismas mujeres quienes continuamente traen de vuelta los sentimientos y recuerdos del pasado que tanto necesitan olvidar.
“¿Cómo pudo ser tan malo conmigo? ¿Cómo se le pudo olvidar todo lo que hice por él?”
El tiempo pasa, y contamos una a una las horas, los días, las semanas, y hasta los años sin él. Pese al tiempo, la angustia y el sufrimiento continúa.
¿Por qué las mujeres nos negamos a dejarlo marchar de nuestros recuerdos, corazón y sentimientos?
¿Por qué a pesar de hablar y dejarlo salir en palabras, se le sigue anidando en el corazón? Pareciese que el tiempo se detuviese, recordamos y repetimos nuestros tormentos del pasado, y lo que es peor: estamos pendientes de lo que “el ex” hace o deja de hacer, y eso no sólo nos llena de tristeza, sino también de cólera.
¿Por qué nos gusta hablar tanto de aquello que nos atormenta? Hablamos tanto de ello que pareciese una historia sin final, muchas mujeres tendemos a conversarlo a diario incluso varias veces al día… Y si bien “recordar es volver a vivir” ¿hasta cuando seremos incapaces de cerrar ciclos en nuestra vida?
AMIGAS.... LA VIDA ES SOLO UNA.... NO DESPERDICIES TU VALIOSO TIEMPO, RECORDANDO Y AÑORANDO A QUIEN NO LO MERECE.
Deja tus penas dolores y sufrimientos en las manos de Dios, emprende el
camino de experiencias y madurez que has adquirido del dolor que te ha
hecho crecer, trasciende y realízate como mujer.