LOS TRES PILARES DEL AMOR
PRIMER PILAR.- INTIMIDAD EMOCIONAL.
Esta se da únicamente mediante COMUNICACION PROFUNDA, al compartir sin arreglos ni selecciones todos los sentimientos; al hablar con el corazón; al exteriorizar dudas, temores, ambiciones, sueños, preocupaciones, alegrías, penas; al confesar los yerros del presente y del pasado; al descubrir ante la persona amada el lado oculto (y desconocido por otros) de nuestro ser. La intimidad emocional es confianza absoluta, complicidad, integración, alianza. Cuando ésta existe, se interpreta rápida y correctamente el lenguaje corporal, se detecta el verdadero estado de ánimo del compañero (desapercibido para los demás) aunque no haya vocablos de por medio. Y cuando se usan las palabras se hace de una forma única y especial, en un nivel de fraternidad, distinto al que se da en la comunicación con el resto de la gente. Las riñas se disuelven cuando aún son pequeñas porque al discutir se procura no causar daño, no herir. La "verdad" es el común denominador entre ellos. En su trato la autoestima de ambos se ve grandemente favorecida pues saben darse su lugar el uno al otro, saben demostrarse aprecio y confianza sin límites. La COMUNICACION PROFUNDA les permite no volver a sentirse solos, les da sentido a su mundo interior, propicia la formación de un universo exclusivo y, finalmente, cuando se alejan, ambos piensan y hablan bien de su pareja.
Este último es un barómetro interesante pues aunque puedas fingirle cariño a alguien, en la soledad tú sabes muy bien qué es cierto y qué no lo es. De modo que si al alejarte físicamente de tu pareja priva en ti la sensación de lejanía emocional, si al no estar a su lado juzgas a tu pareja como tonta, inmadura o torpe; si estando a solas te ríes un poco de su recuerdo y, en ocasiones, hasta compartes esa burla con tus amistades o familiares, no existe en absoluto intimidad emocional.
Millones de matrimonios pasan la vida sin verdadera intimidad; platicando únicamente sobre asuntos superficiales y vanos; los niños, el trabajo, los problemas de la casa, la economía... Por ocuparse de lo evidente olvidan lo fundamental. Su relación de pareja se desvanece, se pierde.
Dicen que los hijos unen al matrimonio, pero esto, en muchos casos es una gran mentira. Los hijos producen distracción y funcionan para los cónyuges como excelente excusa para evadirse mutuamente, ahora tienen problemas nuevos en qué entretenerse; al nacer los niños, surge una aparente integración conyugal, pero es forzada y cuando los hijos crecen y se van, se dan cuenta que lo que los mantuvo unidos durante todos esos años eran los circunstanciales vástagos. Entonces (¡que ridículo e incoherente!), después de sacar adelante un hogar con sacrificios, después de toda una vida compartida, al hallarse a solas, prefieren divorciarse física o mentalmente. Jamás hubo intimidad emocional. Su unión fue vacía, falsa, fingida. Un hermoso teatro que tenía como finalidad hacer creer a los demás que se amaban.
yerro.- Falta o equivocación cometida por descuido o ignorancia.
SEGUNDO PILAR.- AFINIDAD INTELECTUAL (y espiritual).
Las personas no están hechas sólo de emociones, están hechas también de IDEAS. Para nutrirse con los pensamientos de otro se requiere de una correspondencia intelectual, capaz de permitir puntos de vista complementarios. Las personas pueden tener la capacidad de comunicarse íntimamente, pero si no poseen una forma similar de raciocinio respecto a los conceptos fundamentales como el trabajo, los valores, la religión, el sexo, la educación de los hijos, el tiempo libre, la organización familiar, etcétera, si no se enriquecen mentalmente durante su convivencia, terminan excluyéndose, el uno del otro, de gran parte de sus actividades. Pocas cosas alimentan más la llama del cariño que aportar ideas valiosas, desapercibidas para el otro.
En la medida que alguien se ame a si mismo, podrá amar a su pareja, y la autoaceptación es un concepto que se da en la mente. Sólo siendo madura intelectualmente, es posible aceptar la individualidad e independencia del compañero, evitar los celos, el egoísmo, la posesión. Sólo con el juicio sereno y claro se es capaz de perdonar, ceder, dar otra oportunidad, aceptar los errores y estar dispuesto a permitir imperfecciones.
En el cerebro adulto nace el sentido de compañerismo y fidelidad. La moral verdadera no es producto de prejuicios sino de razonamiento inteligente. El grado de desarrollo espiritual se relaciona con la madurez. Todos estos puntos deben tener correspondencia entre las dos personas.
La pareja con afinidad intelectual tiene muchas cosas que compartir; lleva un ritmo de lectura similar, de estudio parecido, de trabajo creativo, coincidente, se supera en armonía, crece y se ayuda recíprocamente.
Raciocinio.- Capacidad de Pensar.
TERCER PILAR.- ATRACCION QUIMICA.
Si tienes con tu pareja intimidad emocional, puedes decir que es TU AMIGA, si además se complementan en ideas, puedes considerarla TU COMPAÑERA, pero falta un último punto indispensable para anudar el lazo de amor: también debe poder llegar a ser TU AMANTE. Esto se consigue con la atracción química. Y no me refiero al gusto corporal pues es frecuente considerar hermosa a una persona sin sentir ningún interés por ella. La apariencia es algo superficial y vano. Lo que enciende el magnetismo entre dos individuos no es un fenómeno físico sino químico. Sólo se da entre algunos. Tal vez no se trate de gente bonita, pero la química les permite ver más allá de lo visible y arder con la belleza que sólo ellos detectan. Cuando hay este tipo de hechizo, a las personas no les importa lo que los demás piensen respecto al físico de su pareja. Se sienten a gusto juntos porque se atraen realmente. Se besan y se tocan con gran espontaneidad, con verdadera pasión. Hay esa magia que los impulsa a estar cerca, agrado mutuo por el estilo, la voz, las acciones, el andar, la legitimidad, la forma especial y única de ser del otro. Finalmente no pueden evitar esa gran identificación sexual que se da, simplemente, sin que ellos lo planeen.
Si descubres una afinidad química NATURAL con tu pareja lucha por conservarla. No basta con que aparezca al principio. Hay que evitar que se pierda con el paso del tiempo. Muchos casados se descuidan, comienzan a convivir mal vestidos y malolientes permitiendo que se apague entre ellos la llama de la pasión.
En conclusión
El hombre está formado de EMOCIONES-INTELIGENCIA-CUERPO. Los tres pilares del amor. La pareja debe tener conexión adecuada en cada uno. Si ya eres casado revisa las grietas que puedan tener.
Al hallar algún problema detente y analízalo con tu compañero. Luchen juntos por fortalecerlo, no lo minimicen porque tarde o temprano la plataforma en que están parados se caerá por ese lado.
Ahora, recuerda que la relación se hace ENTRE DOS. Nadie puede rendir consideraciones a una persona que no las devuelve de la misma forma. Entre el hombre y la mujer se necesita la cooperación mutua. Una entrega que no es correspondida se convierte en suplicio. Los tres pilares no son para que les analices a solas sino en conjunto. Si tú crees que sientes pasión por alguien, si crees que te identificas emocional o intelectualmente y la otra persona no cree lo mismo de ti, no hay nada. Se trata de una idealización, de una relación falsa. La intimidad emocional solo existe al COMPLETAR EL CIRCULO de una comunicación profunda, el desarrollo intelectual es un INTERCAMBIO de valores mentales de los dos. La atracción química verdadera sólo se da cuando se combinan las vibraciones de AMBOS. Si crees estar enamorado pero mal correspondido despreocúpate y olvídalo. No se trata de amor. Solo es una seudo-pasión. Un capricho, un invento tuyo que terminará destruyéndote si te aferras a él.