Este tema es muy delicado pues no se trata de juzgar a nadie, se trata de prevenir futuros dolores a nuestro corazón.
Muchas mujeres casadas, se han relacionado con hombres casados. Seguramente nunca te mintió, desde el principio te confesó que había otra mujer en su vida.
Ya teníamos nuestras vidas construidas en pareja, pero llega la rutina, la monotonía, la soledad, el vacío, o incluso quieres desquitarte de la infidelidad que tu esposo cometió. Buscamos llenar esos vacíos con cualquier cosa pero nada es suficiente. Siempre queremos más y caemos en el juego de la aventura sin saber que ese juego nos puede llevar por mal camino.
Ya estamos atrapados en una situación delicada, y hacemos daño a todos a quienes nos rodean, por no tener las ideas claras. Dejamos que otra persona entre en nuestras vidas, todo parece maravilloso, pero ¿acaso no fue igual cuando conociste a tu pareja? Pues sí, fue lo mismo: Mariposas y cantos maravilloso en nuestros oídos.
No hay nada más difícil que convivir con una persona con la que estás comprometida mientras que a la vez estás enamorada de otro, alguien que un día apreció en tu vida y te hizo sentir felicidad. A tu lado tienes al hombre que prometiste fidelidad, y no muy lejos hay otro hombre con quien tienes otra relación.
¿Realmente crees que cambiará tu vida con él?
No lo creo, volver a caminar por los caminos que ya caminaste no es avanzar, es retroceder. Aunque en este momento sientas muchas emociones nuevas y muchas nuevas ganas de vivir, al final del camino terminará siendo lo mismo, lo que vives actualmente.
¿Por qué habría de ser diferente con tu amante? ¿Acaso no se comporta de la misma manera que tú? Son parejas con un compromiso, y nadie puede ser feliz siendo la causa de destrucción de otro hogar, ¡no a ese precio!
Hay que pensar muy bien las cosas antes de actuar, todo empieza como un juego, parece algo inocente y pasajero, pero luego se convierte en el motivo de tu única atención y felicidad.
Créanme que a la larga o a la corta, todas las parejas terminan igual, y no es aburrimiento, sólo que no sabemos disfrutar de las cosas que Dios nos regala de gratis, ver a nuestros hijos crecer, ver las estaciones y disfrutar con cada una de ellas. ¿Por qué tenemos que poner nuestra felicidad en manos de otra persona?
El amor hay que cuidarlo como una planta, salir de la rutina es bueno, no dejes que una ilusión destruya lo que tanto años te ha costado forjar, ¡piénsalo! Entonces, ¿por qué va a ser dificil decir adiós si nunca ha sido tuyo?
Sé valiente y enfrenta esas situaciones, sal de ese círculo vicioso y pon todo de tu parte para que vuelva el amor y la ilusión por esa persona que un día fue todo para ti, que es preferible retirarse a tiempo y con decoro.