Hacer el amor para mí es penetrar el corazón, lo demás es simplemente sexo, hacer el amor para mí es estar en la cama con esa persona especial, con la ropa en el suelo de la habitación, y abrazarla, sentir como piel con piel forman un calor tan rico y confortante, que hace que el tiempo se detenga... Que se respire amor, se transpire deseo, que las miradas se encuentren, los silencios digan lo que el corazón a callado durante tanto tiempo, hacer el amor es un manjar de sensaciones, que el corazón lata tan rápido al sentir ese beso inesperado. Hacer el amor es penetrar los sentidos, encontrarse a uno mismo y quitarse los miedos, que los nervios no se puedan controlar, que se apoderen de todo tu ser, que el cuerpo tiemble al estar a centímetros de esa persona... Que los te amo aparezcan entre besos, que la sonrisa en tu cara se dibuje con tal magnitud, que te dure todo el día, que las caricias recorran todo el cuerpo, explorando sensaciones, demostrando sentimientos, que las esencias se fundan en una misma, que la respiración se acelere a cada latir del corazón.
Hacer el amor es no querer estar sin esa persona, porque no hay nada más sin ella, desear que ese momento no se termine jamás, que mires tan perfecta que sientas que no necesitas nada más en el mundo, porque esa persona lo tiene todo... Hacer el amor es abrazar a esa persona especial todos los instantes que te sean posibles, sentir sus labios rosar los tuyos y sentir tocar el cielo. Hacer el amor es no poder sacarla de tu mente, de tu espacio, que ocupe todo tu tiempo, que tu mirada se debilite al tener esa persona frente a ti.
El amor no solo se hace en la cama, se hace en todas partes, porque es demostrar lo que el corazón siente por esa persona que tanto amas, que tanto deseas, que solo el escuchar su nombre provoca una gran sonrisa en ti. Que tiembles al sentir sus manos acariciándote... Que el corazón lata tan fuerte. Y no sepas por qué.