Tener como pareja a alguien que tiene hijos no tiene que ser un quebradero de cabeza. Tanto como en las mujeres, ocurre que muchos hombres ya son padres y como todo el mundo, tienen derecho a rehacer su vida inciando una relación nueva. Si esa persona te atrae mucho y es muy especial para ti, “pero” tiene hijos, aquí te decimos qué hacer para que tu relación funcione.
Para empezar, una vez que sales y empiezas a conocer a tu pareja, es mejor informarte sobre sus hijos, (sus gustos e intereses) y la relación que él lleva con la mamá de los niños, lo cual será un punto clave para futuros problemas o no.
Ocurre a veces que con la mamá de sus hijos, tu hombre no haya quedado en buenos términos, entonces allí puede haber un problema, que sería bueno desde ya aclararlo para evitarse problemas en el futuro. Lo ideal sería que él tenga una excelente relación con su antigua pareja, especialmente para los niños.
El momento en que serás presentada a los niños es crucial, sin embargo, tranquilízate; en ningún caso habrá amor a primera vista de modo que te adoren ni bien te vean. Es un proceso en que tanto ellos como tú deben conocerse y compartir momentos. Ahí la única y valedera receta que te damos es ser tú misma, además de ser solícita y amable.
¿Qué? ¿No te gustan los niños? Pues, entonces, piénsalo dos veces, porque si pretendes hacer entrar en tu vida a tu pareja, sus hijos de ningún modo podrán quedar de lado.
Si con el paso del tiempo los niños se muestran renuentes, convérsalo con tu pareja para que juntos ideen maneras de compenetrar más a los niños al grupo familiar, tal vez mediante paseos o actividades al aire libre que impliquen la participación de todos.
Si hay situaciones de inconducta, no pretendas volverte la madrastra de buenas a primera, deja que primero sea el padre quien lo haga y tan solo aconséjales sobre lo que han hecho de mal. Pasarás poco a poco a ser una amiga consejera para ellos, es decir, darás el primer gran paso para ganártelos.