Hola de nuevo.
Muchas veces los hijos cometemos errores, afortunadamente yo nunca me metí en un problema grave, lo único malo que pasó es que, yo siempre fui muy rebelde y muy contestona con mis mayores, pero fuera de eso nunca estuve en un problema donde mi integridad física se viera afectada.
Cuando los niños son pequeños, con amor y paciencia pero sobretodo con ATENCIÓN DE LOS PAPÁS las cosas pueden ir a mejor , los valores se forjan en la casa, no en las escuelas ni con los amigos, los hijos son el reflejo de nosotros, hay un libro llamado ''Mi hijo, mi espejo''. La sociedad se queja de la violencia, de la delincuencia de la inseguridad, sin ponerse a pensar que todos o la mayoría de esos delincuentes, es gente que no tuvo valores, que decidió irse por el camino más fácil y echó a perder su vida.
En mi caso, yo no provengo de una familia perfecta, al contrario mi mamá me abandonó cuando yo era muy chiquita y me quedé al cuidado de mi papá y de mi abuela, ninguno me brindó los debidos cuidados que un niño requiere, porque en primer lugar, mi papá trabajaba -pues mi mamá nunca aportó nada para mí ni zapatos, ni ropa, ni comida, ni nada- Y mi abuela ya estaba muy grande cuando yo me fui a vivir con ellos, en la casa donde yo me crié, no vi los mejores ejemplos, mis tías y tíos e incluso mi papá tenían muchos problemas con todo, con sus parejas, con el alcohol, con el dinero, eran gente ultra inestable, que a mí me rodeo, imagínense a una niña de cinco años tratando de cuidar a los grandes, luego nacieron mis primos más chiquitos y quienes los cuidábamos eramos mi abuelita y yo, yo tenía que cuidar que mi papá no agarrara el carro borracho, me dediqué a la escuela y a cuidar a los grandes, cuando era al revés pues mi tía debía cuidar a sus hijos, mi papá debía cuidar de mí y que mi mamá me dejara fue algo que ni siquiera debió pasar, pero bueno, pasó y era que los adultos cuidaran de los niños, no niños cuidando a otros niños y de paso a los adultos.
No tuve un modelo estable de familia, ni patrones a seguir, en mi casa no había a quien admirar, a mi papá lo respeto, lo quiero pero no lo admiro porque descuidó muchísimos aspectos míos que al rato me trajeron consecuencias en la vida diaria, le agradezco que él no se fuera pero, me hubiera gustado que estuviera más al pendiente mío y que equiparase su trabajo con mi crianza, con mi educación; cuando yo crecí las cosas no eran muy diferentes, pero ya estaba grande y podía defenderme, podía comunicarme y todo... A mi mamá pues la volvì a ver hasta hace unos cinco o seis años, y la relación que tenemos no es una relación cercana ni nada parecido, ella no me ve como una hija ni yo la veo como una madre, porque no la conozco, se fue cuando yo tenía cinco años, que es lo que se puede recordar a esa edad... Al menos yo no recuerdo nada y lo que recuerdo no es afectivo ni positivo.
Lo que les quiero decir con todo ésto, es que, cuando los hijos son chiquitos uno tiene que estar sobre ellos, no para fastidiarlos ni para decirles lo mal que se están portando si no para guíarlos y enseñarles que la vida es una causa y todo lo que ellos hacen por pequeño que parezca tiene sus consecuencias, osea, a mi hija mayor cuando se porta mal, cuando no obedece y cuando se porta de un modo irrespetuoso con su hermana, se le castiga ¿Cómo? Pues castigándole con las caricaturas, quitándole su juguete favorito o bien, no comprándole dulces o cosas que a ella le gustan, porque si la premio y le digo que está bien y me pongo en mi sitio de... ''Está chiquita todavía'' Nombre pues, estaría creando como se dice por ahí ''Un monstruo'' Los hijos son seres que, necesitan apoyo tambièn y comprensión y forjarlos de chicos, comunicarnos con ellos y viceversa...
En más de una ocasión, a mí me han dicho que yo cumplo perfecto con el perfil de los chicos malos, porque, yo en mi vida pude haberme ido con los amigos equivocados y decidir en torno a eso, mi vida sería muy distinta ahora, no digo que peor, ni mejor, pero si sería distinta, cuando uno crece ya está en uno echarse a perder o afrontar la situación que estamos viviendo, claro que hubo personas que conociendo mi entorno familiar me ofrecían muchas cosas, drogas, alcohol, no sé, hacer cosas que estaban contra mis convicciones, yo elegí no hacerlo y decidí enfrentar esa realidad familiar, aprendí muchas cosas, como por ejemplo, a no hacerme daño ni autodestruirme, ni hacerme cosas que sólo me pusieran en un sitio peor que donde estaban mis tíos o mi familia.
Aprendí que los papás no debemos prestarle más atención a los problemas laborales porque eso desequilibra a la familia, aprendí a que si yo quería una vida diferente entonces eso lo tenía que hacer yo misma, por eso conocí a algunas personas antes de estar con mi esposo y él ni siquiera es de ésta ciudad, aprendí que los niños son una de las pocas cosas que vale la pena en el mundo y por las que merece la lucha pelear y educarlos y sacarlos adelante... Y que un niño solamente tiene una infancia, sólo una vez sé es niño, y solamente es chiquito unos años y yo quiero que mis hijas tengan buen recuerdo de su infancia, de su niñez, de los juegos, de las cosas que ven en la tele, prefiero que digan de grandes que su mamá era muy enojona pero que también era un barcote y que su papá componía de todo cuando algo se fregaba en la casa... Yo que puedo decir de mi mamá, si nisiquiera la conozco como para lanzar un juicio de valor... De mi papá tengo poco que decir porque tiene muchos traumas y su corazón siempre está apretado... Conteniéndose algo... Yo soy muy diferente a mis familiares, yo si digo TE AMO, TE QUIERO, TE NECESITO, DISCÚLPAME...
Lo que les quiero decir con todo éste testamento, es que, muchas veces nos ponemos inmersos en los problemas de nosotros, y dejamos a nuestros hijos de lado, sé que uno se cansa trabajando, pero, entonces si no hacemos nosotros lo que nos corresponde ¿Quién lo hará? Ellos no, ni la escuela, ni los polícias, ni nadie... Somos nosotros como papás quienes tenemos que hacerlo, tener hijos es muy bonito, pero también es una responsabilidad enorme, es la responsabilidad más grande que un ser humano puede tener, criar y construir un ser del mañana, eso tiene una magnitud grandísima.
Cuando se sientan muy enojadas con sus niños, mejor dicho, cuando nos sintamos muy enojadas con ellos, cuando sintamos que nos han fallado, que nos han decepcionado y que nos han hecho cosas feas, acordemonos que, ellos estuvieron dentro de nosotros nueve meses, recordemos que cuando los vimos la primera vez recién nacidos, les prometimos algo, en mi caso yo lo hice y poco a poco les cumplo a trancazos y a caídas pero les cumplo a mis niñas la promesa que les hice.
Ésto pues es con mucho respeto, y hablo mayormente de los niños, no de los adolescentes o de los adultos, porque ya un adulto es diferente, un hijo de adulto somos bien diferentes.
Es solamente mi muy humilde punto de vista...!!!
Saludos... =)