Tipos de acoso escolar
El acoso escolar se divide en dos categorías:
- Acoso directo: es la forma más común entre los niños. Peleas y agresiones físicas.
- Acoso indirecto: suele ser más común entre las niñas y en general a partir de la preadolescencia. Se caracteriza por pretender el aislamiento social del individuo. Este aislamiento se consigue mediante técnicas variadas que incluyen: difundir rumores, rechazar el contacto social con la víctima, amenazar a los amigos, hacer criticas de la persona aludiendo a sus rasgos físicos, grupo social, forma de vestir, religión, raza, discapacidad, etcétera.
Por ello, el maltrato entre compañeros puede aparecer de formas muy diversas. Las más comunes son:
- Verbales tales como insultos, motes, hablar mal de alguien, rumores,...
- Psicológicas amenazas para lograr algo de la víctima, para ejercer poder sobre ella.
- Agresiones físicas peleas, palizas, pequeñas acciones insignificantes pero que ejercen presión sobre el individuo al hacerse de forma reiterada, pequeños hurtos,...
- Aislamiento social, marginando, ignorando su presencia y no contando con él/ella en las actividades normales entre amigos o compañeros de clase.
Fenómeno bullying
Resulta complejo definir el fenómeno "bullying", y más aún traducir literalmente este vocablo inglés al español. Implica muchas veces el agredir físicamente a otros compañeros de clase, hacer burlas, etc. Dichas situaciones resultan bastantes comunes en los centros educativos (colegios e institutos), y pueden llegar a ser muy dañinas para quienes las sufren, generalmente en silencio y en soledad.
La palabra "bullying" (pronunciada aproximadamente como: "bulin") se utiliza para describir estos diversos tipos de comportamientos no deseados por niños y adolescentes, entre los que destacan bromas pesadas, ignorar deliberadamente a alguien, ataques personales, e incluso abusos serios. Quien hace el "bullying" puede ser un individuo o un grupo (pandilla).
El término surge de la palabra en inglés "bull" que significa literalmente toro; de ahí se deriva que es una criatura fuerte y que atropellar a otros más débiles y pequeños.
Lo más importante no es la acción en sí misma, sino los efectos que produce entre sus víctimas. Nadie debe subestimar el miedo que un niño, niña o adolescente intimidado puede llegar a sentir.
Por tanto, estas situaciones de acoso, intimidación o victimización son aquellas en la que un alumno o alumna está expuesto, de forma repetida y durante un tiempo, a acciones negativas que llevan a cabo otros compañeros.
Por acciones negativas entendemos tanto las cometidas verbalmente o mediante contacto físico, como las psicológicas de exclusión.
No hay que confundir estas situaciones con los típicos altibajos que se producen en las relaciones entre los alumnos, especialmente a lo largo de la etapa de la adolescencia y pre-adolescencia.
¿Quiénes son responsables?
Los profesores y los padres tienen una responsabilidad especial en el cuidado de niños y adolescentes, y eso incluye ayudar a quien es víctima de estas conductas no deseadas en la escuela. Sin embargo, los adultos no pueden hacerse cargo estas tareas sin la ayuda de los propios niños y adolescentes. La situación tiende a complicarse cuando el "Bully", o sea la persona que ejerce el abuso, amenaza a la víctima para mantenerla callada y evitar que pida ayuda o sufrirá peores consecuencias.
Cuando alguien está siendo víctima del fenómeno "bullying" en un centro educativo, el resto de compañeros que no están implicados directamente sí saben sobre lo que está sucediendo en el aula, en el recreo o en la calle. Aunque ellos no estén envueltos, podrían ayudar a quienes sufren estas conductas no deseadas. La educación es un punto muy importante para que no se llegue a esta situción de niños acosados por otros.
¿Qué hay que hacer en estos casos?
Si nos encontramos ante un caso de acoso o "bullying", debemos intentar convencer a la víctima de que recurra a la ayuda de sus padres y profesores y denunciar cuanto antes dicho estado.
Si el acosado no quiere colaborar a solucionar el problema, la situación se vuelve más difícil. Para ayudarlo, se le tiene que demostrar que puede contar con ayuda de los mayores en cualquier momento, y así, irá recuperando la confianza y, con el tiempo, superar esta situación. Para que esto funcione, generalmente, es indispensable el apoyo y la amistad de un cierto número de personas que le defiendan de sus enemigos.
Ejemplos concretos
Cuando un chico o una chica se mete con otro compañero o compañera insultándole, poniéndole motes, burlándose de él, amenazándolo, tirándole sus cosas, agrediéndole o diciendo a los otros que no se junten con él.- Cuando los compañeros se meten con otros, se burlan de su aspecto, se ríen de ellos, y luego dicen que ha sido jugando o que el otro es un "quejumbroso".
- Cuando algunos chicos les dicen a los demás que no le hablen a otra, para que no tenga amigos, o le acusan de algo siendo mentira.
- Cuando un chico abusa de su fuerza.
- Cuando un chico se hace el interesante, chulean, pegan, intimidan o amenazan a otro compañero que no es tan fuerte, o que le da vergüenza enfrentarse con él y siempre calla.
- Cuando un grupo de chicos levanta rumores falsos sobre otro, simplemente porque no quiere salir con ellos, no está dispuesto a hacer lo que ellos quieren, ni a aguantar sus desplantes, y empieza a perder sus amigos y a adquirir "cierta fama.