El reto de ser padres.
Tener un hijo no es sólo leer muchos libros sobre el tema y decorar la
habitación del bebé, hay una serie de cuestiones que hemos de tener muy
en cuenta para que no nos pille de sorpresa eso de ser padres hoy en
día.
cuando son bebés, no es suficiente con atender cada una de sus
necesidades, acudir a consolarle siempre que llore, preocuparse por su
sueño, por su alimentación; los cariños y los mimos también son
imprescindibles. Sólo quien recibe amor es capaz de transmitirlo.
diálogo. Para que se sientan queridos y respetados es imprescindible
fomentar el diálogo, adecuado en cada ocasión a la edad del niño.
De nada sirve que le riñamos por una actitud o un comportamiento y que
luego nosotros lo hagamos, lo que vean de los mayores tenderán a
reproducirlo, por tanto hay que poner especial cuidado en lo que se
hace y se dice delante de ellos. Existen muchos métodos de decir a los
niños lo que deben y no deben hacer pero ninguno tan eficaz como el de
predicar con el ejemplo y que vean esa actitud en casa.
En la actualidad, muchos padres están muy ocupados durante la semana
para poder dedicarle tiempo a sus hijos por lo que el fin de semana hay
que recuperar este tiempo perdido y estar con ellos, salir, jugar,
divertirse y disfrutar de ellos. Muchos padres han reemplazado el hecho
de que no puedan pasar mucho tiempo con sus hijos con la abundancia de
juguetes y objetos de todo tipo, pero de nada sirve tener más juguetes
en la habitación porque una cosa nunca puede compensar a la otra y, de
esta manera, no hacemos más que hacer crecer su afán consumista.
Cada niño tiene una personalidad que hemos de aprender a respetar. Los
padres, en ocasiones, se sienten defraudados porque no tienen las
características que a ellos les gustaría que tuviesen, pero hay que
aceptarles todas sus virtudes y defectos y no imponerles ideas sobre el
futuro en torno a lo que los padres quieren que sean de mayores.
En definitiva, ensalzar más sus virtudes y no prestar tanta atención a
sus defectos, lo cual no significa que perjudiquemos su educación en el
respeto a las normas básicas de convivencia.
más vale cuando estemos muy enfadados en vez de decir "no te soporto" o
" no te aguanto" contar diez y salir de la habitación donde estemos con
el niño, cualquier técnica es buena antes de reaccionar con agresividad
a una de sus trastadas ya que de esa manera nos tendrán el punto tomado
y sabrán como ponernos nerviosos enseguida.